La semana pesada estaba leyendo sobre el cuarto aniversario del desastre de la Torre Grenfell. No necesito mostrar fotos, todos sabemos lo que sucedió,
El evento en sí mismo fue devastador, pero esto resultó ser nada comparado con la devastación que el revestimiento externo ha traído a muchos.
Después de Grenfell se descubrió que muchos edificios de gran altura se construyeron con el mismo o similar tipo de material que no es resistente al fuego.
Se supone que los propietarios vitalicios, que son propietarios del terreno en el que se asienta el edificio, absorben el costo de hacer que los edificios sean seguros cuando sea posible. Pero en la práctica, esto a menudo se transmite a sus arrendatarios.
El gobierno ha anunciado una financiación de mil millones de libras esterlinas para edificios que no cumplen con las normas de construcción y que superan 18 m de altura, esto ha resultado en muchas personas sean consideradas responsables de cubrir los costos para arreglar las cosas, y en una posición desesperada, sin tener la culpa. Algunas personas enfrentan facturas superiores al valor de su propiedad para emprender las mejoras necesarias para que los edificios cumplan con los estándares, lo que efectivamente convierte a los propietarios en prisioneros. Aunque las personas con capital compartido que solo poseen un porcentaje del edificio son responsables del 100% de las reparaciones. ¿Qué pasará si alguno o alguno de los propietarios no puede o no quiere pagar?
La gente vive con miedo cuatro años después de que se hiciera público. El gobierno necesitará introducir fondos adicionales para acelerar el programa y tomar control de la situación antes que tengamos otro desastre.
