La Compañía Escocesa de Energía ha adoptado un enfoque científico para utilizar estudios GPR en proyectos a gran escala en áreas densamente pobladas. En los entornos del centro de la ciudad donde hay líneas de tranvía antiguas y servicios públicos, diseñar una ruta para un bloque de cables puede ser un campo minado.
Históricamente, para los proyectos de reemplazo de cables de 132kv, normalmente cavamos una serie de pozos de prueba de zanjas cortadas para ubicar tuberías de cables y servicios bajo tierra y registrar su profundidad y posición dentro de la carretera. Entonces, el diseño de ingeniería debe ver los espacios disponibles para determinar dónde podría colocarse un bloque de cables. Si es necesario mover otros servicios, esto podría presentar un problema y un retraso.
Utilizando tecnología GPR, junto con los registros de servicios públicos podemos obtener información más precisa, no solo la locación, sino la profundidad y la identificación de cada obstrucción.
La información GPR se descarga en el software CAD y se produce un modelo 3D. Es una opción costosa, pero ha reducido el número de excavaciones en las carreteras y muchas molestias.
